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Three extremes, Fruit Chan, Park Chan-Wook, Takashi Miike (2004)

Está compuesta por tres mediometrajes muy diferentes, pero que tienen un nexo en común: el terror. Surge como un experimento panasiático que reúne a tres de los mejores directores actuales del continente: Takashi Miike, Fruit Chan y Park Chan-wook como representantes de Japón, Hong Kong y Corea del Sur, y que sirve para dar a conocer de una forma sencilla el cine asiático, en este caso de terror.

El primero de los mediometrajes, ‘Box‘ de Takashi Miike recurre a una experiencia traumática de la infancia de una exitosa y bella novelista para recrear la que es una de sus producciones más cuidadas, sobretodo en cuanto a fotografía, que en este caso es casi poética. Huye, por lo tanto, de lo que se espera de él y nos presenta una historia tranquila pero que consigue, con su ritmo lento y sosegado, mantener la tensión de principio a fin.

En ‘Dumplings‘, Fruit Chan nos enseña una forma muy distinta de entender el terror. La búsqueda de la belleza y la juventud llevan a una mujer a probar una dieta que resulta bastante desagradable. El tema central es la falta de escrúpulos, que Chan afronta a base de humor negro y pocas sutilezas. Eso sí, debemos agradecer (o criticar, según el gusto) que no haya sido tan escatológico como podría. Park Chan-wook es un director que, desde hace ya años, destila elegancia y saber hacer en sus películas, y ‘Cut‘ no es una excepción. A través de una estética, basada en la simetría y el cromatismo, que cautiva, ahonda, aún más, en su tema recurrente: la venganza.

La envidia y el rencor llevan a un hombre a vengarse de un famoso director de cine, y Park inventa para la ocasión torturas imposibles que llevarán al protagonista a una situación límite. Pero, sin duda, lo peor no son las torturas, sino que en ‘Cut‘ es la elección a la que se somete el protagonista el horror más aterrador.

[Rating:9/10]