La Estadea Logo

Devildriver ‘The last kind words’

Cuando Dez Fafara decidió abandonar Coal Chamber y crear DevilDriver, dio un paso siguiendo sus instintos musicales. Su idea era alejarse del sonido cercano al nu metal que caracterizaba a esa formación.

Y así vinieron DevilDriver y ‘The fury of our maker’s hand‘, que les permitieron girar por los estados con algunas de las bandas más reconocidas del momento, e incluso llegar a España, donde tuvieron una breve participación en el LorcaRock de 2006, en un escenario que será recordado por una pésima acústica, que dio al traste con algunas actuaciones prometedoras. En julio nos trajeron este ‘The Last Kind Words‘, y aunque hace ya unos meses del lanzamiento, no me he resistido a hablaros de él, porque estamos ante un señor disco.

Este nuevo trabajo supone un giro acentuado hacia sonidos aun más extremos, y como muestra, el tema que abre fuego, ‘Not all who wander are lost‘, una auténtica declaración de intenciones: riffs afilados, duros y rápidos, una voz agria y descarnada, y una batería que puede llevar a la locura a los no preparados. Y es que, a pesar su endurecido discurso, no han olvidado la existencia de la melodía, lo cual hace mas llevadero el viaje. Sin apenas lugar al descanso, ‘Clouds over California‘ nos sacude con riffs técnicos y profundos, donde Fafara expulsa toda la rabia que lleva dentro. Un auténtico temazo de principio a fin.

Bound by the moon‘ entra con unas guitarras oscuras y voces sintetizadas, cogiendo fuerza hasta llevarnos a un estribillo con guitarras de corte épico. Y siguiendo en esta línea nos recibe ‘Horn of betrayal‘, que además supone otra exhibición a la batería por parte de John Boecklin, en un ejercicio en que el doble bombo tiene tanto protagonismo como la voz del propio Fafara. Los momentos más gloriosos del plástico vienen de la mano de ‘This fighting words‘, una explosión ascendente de riffs, estribillo para mover la cabeza y el solo más destacable de los pocos existentes, todo con un toque épico que viene como a cerrar una trilogía con los temas anteriores.

La carta de presentación de ‘Head on to heartache (Let them rot)‘ es un riff agudo, que da paso a un tema algo más lento que la media, mucho más pesado. Otra de las pistas destacadas es ‘Burning Sermon‘, que se caracteriza por una virtuosa base rítmica y la solidez de las guitarras, con un final sorprendente. El único corte que se me ha hecho pesado es el medio tiempo ‘Monsters of the deep‘, pienso que la voz de Fafara pierde cuanto más lento es el tema. Para el comienzo de ‘Tirades of truth‘ parecen haberse inspirado en Machine Head, pero de pronto, surge un riff corrosivo puentenado un doble bombo, que parece surgir del fragor de una batalla futurista. El resultado es un tema bastante oscuro, que reserva la melodía para el estribillo.

El arreón final nos lo dan primero ‘When summoned‘ y ‘The axe shall fall‘, dos temas que responden al esquema general del disco: furia vocal, excelente bases instrumentales (muy especialmente de la batería), y el regusto amargo de la melodía que flota entre tanto death. Si sois amantes del estilo que ha venido en llamarse ‘death metal melódico’, haceros un favor y pillaros este disco, que junto con el de Arch enemy, estarán en el podio al final del año.

Etiquetas relacionadas