Los cerebros de Asia no descansan en su intento por hacer que su proyecto Icon obtenga la relevancia que desean. Su tercer capítulo sigue los mismos cánones que los antecesores, ofreciendo una majestuosa pero algo somnolienta demostración de creatividad.
Tercer capítulo de la epopeya protagonizada por los cerebros de los míticos Asia, Geoffrey Downes y John Wetton que sigue navegando por los mismos cánones sonoros que sus anteriores entregas. La idea de Icon es la de dar rienda suelta a las inquietudes de ambos músicos que quizás no puedan encajar en las obligaciones discográficas de unos recién reunidos Asia. Alquilando los servicios de un genio como Dave Killmister (Famoso por prestar su guitarra a famosetes de la talla de Roger Waters) el tercer fragmento del icono vuelve a avisar de que su escucha depende de cierto grado de aclimatación por parte del explorador.
Una vez mas, los sonidos puramente AOReros se mezclan con ramalazos mas rockeros y pinceladas de ‘ida de olla cósmico/nominal/musical’ sonriendo por supuesto a otro grupo con mucho peso en las partituras como es King Crimson. Aquí vamos a encontrar el preciado e inconmensurable teclado de Geoffrey Downes, la carismática pero limitada voz de un John Wetton que no enveje y la genialidad de un invitado de honor como el señor Killmister, que pasea su guitarra como si este fuera el disco de sus sueños. El disco abre con un corte animado, muy melódico y que no desentona a lo que muchos esperan de este material y es que ‘Twice The Men I Was’ es facilmente digerible y disfrutable, con una excelente ejecución de teclados por parte del cerebro Downes y la inesquivable aportación de Killmister a la guitarra que suelta unos cuantos solos heróicos.
Continuamos con la que para mi es la mejor canción del disco y es que ‘Destiny’ respira Asia por todos sus poros. Increible la atmosfera, los coros, el estribillo… hasta John Wetton parece cantar mejor de lo que realmente lo hace. Cortes así son los que hacen brillar el disco y es que el reducir la velocidad del tempo no implica que el sopor se incluya de serie en el pack. Brillante, majestuosa… el icono de este tercer capítulo.
La cosa comienza a ponerse fea (Quizás por mi poca simpatia hacia el género que planteamos a continuación) y es que creo que ‘Green Lights And Blue Skies’ es mas una tortura que una composición. Retomamos las características citadas anteriormente para colocar la psicodelia y la medicina del sueño en un mismo combinado letal, y es que la escucha de este pestiño lento, soso y aburrido puede conseguir el cierre definitivo de vuestro reproductor. Horrible el estribillo digitalizado asi como las lineas vocales que han endosado a un John Wetton que consigue hacernos entrar en un estado de trance inexpugnable. Salvando el fin, conseguimos alcanzar otro martirio, y es que la balada ‘Raven’ lleva acumulados los mismos votos de quema que la anterior que acabamos de comentar: Un lento aburrido, sin sentimiento, que parece apagarse a medida que avanza su minutaje y que ni la cantarila invitada (No interesa saber quien es… no por esta canción) sabe enderezas con algo de feeling (‘We Kiss… then turn away ¿Que sarna de estribillo es ese?). Menos mal que temas como ‘My Life Is In Your Hands’ consiguen enderezar el rumbo del navio y es que de nuevo recogemos la vena mas sencilla y melódica del dúo protagonista para brindar una canción bien estructurada, con arreglos de cello, teclados brillantes y un estribillo tardio que nos levanta una sonrisa.
En lo que se refiere al rock, podemos encontrar una dósis de calidad discutible en ‘Sex, Power And Money’, una canción dibujada con demasiada prisa que solo llega a cumplir el objetivo de despertarnos del posible letargo. Subrayo ‘Don’t Go Out Tonight’ como otro de los cortes clave del álbum para comprender que el AOR parece funcionar aun cuando se quien introducir mil y un arreglos de teclado espacial, otro pequeño diamante vaya.
Si he de recomendar el disco a alguien, lo haria sin duda alguna a todos los que de alguna manera habéis seguido los dos capítulos anteriores de este proyecto, a los seguidores de Asia y también a los amantes del rock psicodélico pues esta resulta la combinación que resume un disco imperfecto por la inclusión de temas malignos pero interesante por descubrir todos los detalles que esconde.
[Rating:8/10]