Posiblemente los fans de Pain of Salvation estén acostumbrados a sus habituales cambios de registro. Quizá sea por tratarse de un grupo de los llamados progresivos o quizá por su propia naturaleza cambiante y ansiosa de experimentación. El caso es que esta vez se encuentran ante unos de esos disco que amas u odias.
La primera parte de este nuevo proyecto (la segunda vendrá en septiembre) supone una nueva vuelta de tuerca a la carrera de PoS. Si alguien espera encontrar metal progresivo, quizá a tenor del Ep ‘Linoleum’, lo lleva claro. Tenemos por delante doce temas entre los que predominan el blues, el jazz e incluso el soul. Y hay que decir que a la primera escucha, es fácil que te pille desprevenido.
La primera cosa que me llama la atención es la grandeza del trabajo vocal de Daniel Gildenlöw Una voz totalmente nueva, que me recuerda a clásicos del rock como Robert Plant en su trabajo en solitario. Un registro melódico al máximo que es capaz de emanar de lo más íntimo como en la conmovedora ‘Sisters’ y a lo más desgarrado en ‘When it hurts’. También me ha gustado el trabajo del nuevo batería Leo Margarit, que demuestras su tremenda calidad en temas como ‘She likes to hide’ o ‘Curiosity’, uno de los más progresivos del plástico.
Las orquestaciones y arreglos más variados abundan a lo largo del disco. Desde violines a trombones, desde el mellotron al banjo. Y de ahí que en apenas tres canciones pasamos de la América del soul y el gospel al sur, a las melodías country y de ahí al circo. Para los que buscan algo un sonido más duro seguramente ‘Darkness of mine’ y ‘Linoleum’ serán como un pequeño oasis en el desierto.
En resumen, este es uno de esos discos de los que no te puedes hacer una idea leyendo una o mil críticas. A mi personalmente me ha gustado, porque desborda calidad y fe en lo que se hace. No es un paso de ciego, sino un paso tan arriesgado como consciente. Es un disco que en muchas fases desprende calidez, y que invita a ser escuchado en una habitación con luz tenue. Quedamos de todos modos a la espera de la segunda parte del trabajo para comprobar cómo de brusco es el giro en su sonido.
[Rating:8/10]
