Tras la salida a la venta de lo último de Echidna, otro de los lanzamientos destacados que tenía preparados este año el sello luso Rastrilho records era el regreso del quinteto We are killing ourselves, o W.A.K.O.. Cuatro años después de su interesante debut, ‘Deconstructive Essence’, vuelven de nuevo con este ‘The Road of Awareness’.
El disco fue grabado por Daniel Cardoso (Angelus Apatrida, Heavenwood), y masterizado por un Josh Wilbur, conocido por trabajar en Nueva York también con Hatebreed o Lamb of God entre otros. De ahí que después de una pequeña introducción ambiental, ‘The shape of perfection’ nos reciba con una producción capaz de hacer temblar cualquier oreja. El estilo que conducen se podría decir que es una mezcla de thrash y death muy orgánica, con un sonido contemporáneo, complejas líneas estructurales y una furia demoníaca.
Muy en la onda de grupos como Meshuggah o Gojira por esa atmósfera que consiguen lograr casi de ciencia ficción, si se me permite la inclusión de una etiqueta asi en la crítica de un disco.
‘Ship of fools’ no hace más que adelantar un poco más la línea de fuego, con una lluvia ácida de ligados en duelo con la percusión y reproches en carne viva de Nuno. Llama la atención el constante dominio de la violencia fruto del propio estilo en contraste con la técnica y también compenetración instrumental. Todo en canciones largas de entre cuatro y seis minutos, que como en ‘Dissonant Dark Dance’ arremeten con cambios de ritmo muy contundentes y ataques que oscilan de ese thrash técnico al casi brutal death.
Thrash/death luso de nuevo milenio 100% disfrutable, con una producción asesina, virtuoso y pensado para romper columnas en el foso.
En ‘Drifting beyond reality’ comienzan con una armonía distorsionada que desemboca en un genial toque thrash de la vieja escuela para dar paso de nuevo a la fusión moderna. En esta ocasión con riffs cortos y precisos, intercalados entre un juego de voces donde nos podremos encontrar con uno de los pocos estribillos ‘limpios’ del disco. ‘Extispicium’ o ‘Coded Message of death’ están pensadas directamente para que la gente se mate entre sí en directo, con un doble bombo criminal, palmeos hechos con cables de alta tensión en lugar de cuerdas, gruñidos, coros eufóricos. Por supuesto distintas y elaboradas partes, siendo estas dos junto a ‘The Shape of Perfection’ directamente de lo mejor del disco.
En ‘The sorcerer’ por ejemplo arrancan también con ese punto de vieja escuela mezclado con una de las progresiones más agresivas que encontraremos. De esas canciones que a pesar de su posición en el tracklist, en un concierto no se pueden dejar nunca para el final porque ahí no llega con aliento ni el primero.
Terminan con ‘Intersected to a Close Premonition’ y ‘Coronation of existence’ que a falta de otra descripción más afinada son una puta locura. Cambios de ritmo repentinos, partes enfrentadas, voces ultra-desgarradas, todo muy técnico eso sí, y envuelto en un sonido tremendamente compacto para completar la escucha, como si en lugar de diez llevasemos una sola hostia, pero bien grande. Por quejarme por algo, el conjunto se puede hacer un poco denso, y de la última de las dos yo hubiera prescindido sin pensarlo del filtro que utilizaron para la voz en alguna parte, que entre la afinación ya grave de por sí de las guitarras y ese efecto robótico, consiguieron un toque artificial totalmente innecesario.
Thrash/death luso de nuevo milenio 100% disfrutable, con una producción asesina, virtuoso y pensado para romper columnas en el foso.
[Rating:8/10]
Tracklist
01. ‘The Shape of Perfection (T.R.O.A.)’ (Escuchar)
02. ‘Ship of Fools’
03. ‘Dissonant Dark Dance’
04. ‘Drifting Beyond Reality’
05. ‘Extispicium’
06. ‘The Shadows Collapse Within’
07. ‘Coded Message of Deat’
08. ‘The Sorcerer(The Blood of the Titan)’
09. ‘Intersected to a Close Premonition’
10. ‘Coronation of Existence’