Tres años después de su más que notable segundo LP (comentado aquí), los australianos Be’lakor nos dispensan otra intensa lluvia de riffs con su tercer disco, ‘Of breathe anf bone‘, que con toda probabilidad los situará entre los elegidos de la nueva hornada del denominado death metal melódico.
Como ya ocurriera con sus antecesores, este nuevo trabajo se caracteriza por temas largos y densos, en los que podemos encontrar varios giros en la melodía y cambios de velocidad. Otra de sus marcas distintivas son las densas cortinas de guitarra, a base de unos riffs que parecen de hormigón armado y que se combinan con fases en las que predomina una melodía construida a base de punteos dobles apoyados en una enorme base rítmica.
Otro de los signos diferenciales del grupo es la tremenda voz de su vocalista, profunda, grave e intensa y que me recuerda a la de Johan Hegg (Amon Amarth) o Jukka Pelkonen (Omnium Gatherum).
En esos parámetros se mueven los primeros temas como ‘Abeyance‘, ‘Remnants‘, dos temas cortados por el patrón clásico del grupo. Con un espíritu más épico tenemos las siguientes ‘Fraught‘, con una pequeña intervención del piano, y ‘Absit Omen‘, con unas melodías algo más ligeras.
La deliciosa pieza instrumental ‘To stir the sea‘ da paso a una segunda parte del disco donde la melodía tiene mayor peso. Creo que esta parte es la que muestra una mayor evolución del grupo, que en discos anteriores pudo pecar de una excesiva uniformidad en los temas. En seguida ‘In parting‘ nos sorprende con la presencia recurrente del piano en la melodía, como elemento novedoso y refrescante y por supuesto, sin renunciar a todo lo anteriormente comentado. En ‘The dream and the waking‘, otro tema larguísimo como el anterior, es la guitarra española la que se añade al piano y aparece puntualmente para dar una nota de distinción.
Se despide la escucha con ‘By the moon and star‘, un corte no demasiado violento y que eleva el nivel épico de la escucha hasta el punto de trasladarme mentalmente a mundos medievales como el de Juego de Tronos. Qué sería de una serie así con una banda sonora como esta. El tema tiene un par de cambios y una parte central acústica que lo hacen aun más interesante.
En definitiva, una propuesta que todo amante del death melódico debe empezar a tener en el catálogo, porque no creo que tarden mucho en dar el salto hacia el viejo continente. Es un trabajo que no destaca por su brillo, pero sí por su solidez y su trabajo de conjunto y que además, presenta mejoras en el apartado de la producción. Yo aviso: ojo con estos chavales.