Seguramente muchos seguidores de la escena americana estaban esperando el retorno de la formación liderada por la neumática Maria Brink. Y ahora que ya la tienen aquí, no sé qué cara se les habrá quedado. El caso es que la formación da un giro hacia sonidos sensiblemente más industriales, con bastantes arreglos electrónicos y una estética que me ha recordado una mezcla entre Marilyn Manson y Lady Gaga. Como toque final, una corte de pechugas en adobo para dejar un extraño sabor de boca.

Metallica en los años 90, la madre de todas las discordias
Visto desde la distancia ‘Load’ y ‘Reload’ me parecen una de las maniobras más valientes y arriesgadas de la historia del rock.