‘Share your hate‘ se trata del álbum debut de los thrashers gallegos Strikeback. Entre sus influencias citan a formaciones emblemáticas como Annihilator o Exodus, y para la grabación se desplazaron hasta los estudios A Casa do Rock, dejando la mezcla y producción en manos de Erik Monsonis (Skill to Kill, Heid, Father Golem).
Hacía tiempo que les llevaba viendo en directo, y la verdad es que ya tenía ganas de sentarme a escuchar con calma este trabajo, sobretodo para calcular hasta que punto eran capaces de trasladar en estudio la buena impresión que siempre me causaron sobre el escenario. Strikeback son un grupo que domina mucho las partes instrumentales, y que al margen de su evidente ascendente clásica, les encanta la velocidad.
«Thrash clásico, técnico, envenenado y diseñado con el único objetivo de bombardearte la cabeza»
La escucha comienza con ‘Breathing Fire‘, un tema con dos minutos de introducción que para cuando quieres darte cuenta ya te ha pasado por encima un par de veces. ‘Revolution‘ fue la primera canción que decidieron compartir para presentar el disco, y la verdad es que resulta una elección muy acertada. Arranca de nuevo con una feroz embestida que desemboca en ritmos puramente headbangueros. En canciones como las speedicas ‘Kill or be killed‘ o ‘This is thrash‘ seguramente engancharán a aquellos fans de los Overkill más adrenalíticos. En otras como ‘Supremacy‘ nos dejan ver su rostro más heavy con progresiones galopantes, guitarras eufóricas y estribillos de puño en alto. En este disco no hay medios tiempos, solo metralla. Así se puede comprobar por ejemplo en el tema que lleva su nombre, donde por momentos le aprietan hasta aproximarse un poco incluso al death.
Su receta es un thrash clásico, técnico, envenenado y diseñado con el único objetivo de bombardearte la cabeza. La producción está a la altura de las circunstancias, y el conjunto resulta muy recomendable para los aficionados a sus mencionadas referencias, o a grupos de este milenio que están regenerando el panorama como Havok o Evile en el plano internacional, o Angelus Apatrida y Crisix, por poner un par de ejemplos, en nuestra escena estatal.
Todos los temas tienen unos inicios letales
Relación disco-directo impecable
‘Revolution’
Que no tengan más presupuesto para sonar aun más misil todavía.
Terminar algunas canciones con bajada de volumen mientras siguen tocando (manía mía)
