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Vita Imana + Skill To Kill + The Wasteland Massacre en la Sala Rock City de Valencia

Triple ración de metal nacional la que nos metimos entre pecho y espalda el pasado sábado en la Sala Rock City de Valencia. Tres grupos y tres propuestas diferentes, pero todas en la parte alta de la Escala Richter de la leña.

Los primeros es salir a escena fueron los locales The Wasteland Massacre. Se trata de un quinteto que lleva ya cinco años dando guerra en el underground valenciano y nacional. La aproximación más simple a su estilo nos podría llevar a definirlos como prog death melódico, aunque se le queda corta. Aunque el sonido de la sala no estaba preparado para ellos, mostraron con valentía sus armas musicales.

El exiguo espacio que dejaba el equipo de Vita Imana no permitía excesivas florituras a la hora de moverse sobre las tablas, pero ello no fue obstáculo para que el bajista, Frank, se luciera al frente, dando todo y más en cada nota. También pudimos ver a la vocalista Eva dejarse llevar por el momento y lanzarse a hacer molinetes de melena en un par de ocasiones. Su voz me trajo a la memoria la brutalidad de Angela Gossow en la parte gutural, pero no terminó de encajarme en su aspecto melódico. En definitiva, y para ser la primera vez que los veía en directo me gustaron bastante. Habría que verlos en un show en el que tengan más protagonismo para calibrar su verdadero potencial.

Setlist: 1.The Time Seller – 2.Out Are The Lights – 3.Devil Inside – 4.Singularity – 5.Closed Doors – 6.The Shattering Stream

Tras una pausa para el protocolario cambio de escenario, comparecieron sobre las tablas los deathcoretas Skill To Kill. Personalmente, su estilo es, de los tres que se daban cita el sábado, el que menos sigo, por lo que me resulta algo más difícil hablar de ellos con más criterio. Tras haberlos visto abriendo para Napalm Death hace ya unos meses, lo primero que llamó mi atención era la presencia de Carlos (Eye of Hubble) en el puesto de guitarra que dejó Richard. Su presencia no pasa precisamente desapercibida, y en algún momento temimos por la integridad del resto de miembros, especialmente de David Mancha, cuya cabeza podía haber quedado incrustada en el cabezal de la guitarra un par de veces.

Vita Imana + Skill To Kill + The Wasteland Massacre en la Sala Rock Cit
Desde ‘Inferno’ en adelante, Skill To Kill pareció venirse arriba, con un mayor ritmo y más contundencia. Fotografía: Reaktiu

Entrando en lo puramente musical, el grupo aprovechó el show para presentar algunos temas nuevos. La imagen que tenía de su directo era algo más potente de lo que pude ver en los temas iniciales. Era como si les terminara de faltar un punto de velocidad tanto en la ejecución como en la expresión corporal. Tan solo David, el vocalista, con algo más de espacio ponía algo de movimiento. Si añadimos que hubo algún problema técnico que hizo que la caja de la batería se escuchara bastante baja, la verdad es que la primera mitad del show no me terminó de llegar. Sin embargo, desde ‘Inferno’ en adelante, el grupo pareció venirse arriba, con un mayor ritmo y más contundencia y con movimientos más conjuntados entre los miembros, o al menos, así lo percibí yo. De lo que más me gustó fue el variado repertorio de registros vocales, dentro de lo que es el metal extremo, de David Mancha.

Setlist: Intro 0, Through the mirror, Prisoner to your words, Ira, Hate, infierno, Traitors, Our Fears y The Game

Tras el oportuno cambio de escenario, despejando la zona del equipo de los dos grupos precedentes, comparecieron los protagonistas de la noche: los madrileños Vita Imana. Que este grupo no esté ahora mismo pateando culos por toda Europa y Sudamérica es algo que no debería estudiarse aquí, sino en la Nave del Misterio.

Y es que el pasado sábado vino a consagrarse definitivamente una unión que venía gestándose desde hace tiempo. Vita Imana y la sala Rock City se hacen más grandes los unos a los otros cuando están juntos. Y si de maestro de ceremonias está Alex Cappa el éxito está asegurado. Estar casi en primera fila y sentir cómo te atraviesa cada nota y cada decibelio, y no llegar a casa deseando arrancarte los tímpanos es algo que se agradece infinitamente.

«Vita Imana gozan de un cariño muy especial en esta ciudad y la gente se lo demuestra cada vez que hay ocasión (…) Un show en el que no faltó un ápice de intensidad»

Además del apartado técnico, hubo dos circunstancias que hicieron que el concierto fuera especial y espectacular. Primero, un público totalmente entregado. Segundo, una banda cómoda sobre el escenario, con ganas de divertirse y hacerlo pasar bien al respetable. Lo del público no es novedad: Vita Imana gozan de un cariño muy especial en esta ciudad y la gente se lo demuestra cada vez que hay ocasión. Lo segundo es casi una consecuencia de lo anterior: cuando te sientes como en casa es más fácil ser tú mismo, quitarte de encima las capas que sobran y dejar salir lo que de verdad llevas dentro.

Vita Imana + Skill To Kill + The Wasteland Massacre en la Sala Rock City
Un concierto en el que con un solo gesto de Javier Cardoso se formaban circle pits o walls of death. Fotografía: Reaktiu

¿Y cuál fue el resultado de la mezcla de todo esto? Un show en el que no faltó un ápice de intensidad, pero que tuvo un aire íntimo. Un concierto en el que con un solo gesto de Javier Cardoso se formaban circle pits o walls of death. Un concierto en el que hubo tiempo para felicitar el cumpleaños al presidente del Club de Fans de Vita Imana en España o dedicar un tema al recientemente fallecido fotógrafo Oier Bernal, sin que nada de esto pareciera un pegote o se saliera del guión propio del concierto. Un show en el que la gente que estaba en primera fila cantó tantos estribillos al micro como el propio Cardoso. Un concierto en el que cada espectador sintió como suya la falta de Miriam sobre las tablas por segundo fin de semana consecutivo.

Setlist: Gondwana, Manos de Sangre, Nada por Ti, Oxígeno, Ablepsia, Parásito, Sistema Nervioso, Crudo Invierno, Equilibrio, Paranoia, Depredador, Un nuevo sol, Seis Almas, Romper con todo y Quizás no sea nadie.

Y para terminar de poner la guinda, esa noche se cumplió algo que muchos músicos reclaman casi a diario: en la sala había representación de gente de Killus, Nodriza, Exodia, [InMute] y Noctem. Es decir, había bandas locales viendo (y gozando) a otras bandas sobre el escenario. Como bola extra, por si faltaba poco, contamos también con la presencia de un maestro de la mesa de mezclas con es Mika Jussila (Finnvox Studio), que seguramente tuvo que graparse la gorra de cuero a la cabeza para que no saliera despedida.

En resumen, que lo que podía haber sido una gran noche de metal nacional terminó siendo una noche memorable. Solo espero poder seguir viviendo conciertos así mucho tiempo.

Fotografías: Reaktiu