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El otro lado del metal (LXII): Phlegeton «Veo un cierto resurgir de bandas realmente underground»

Nombre: Phlegeton
Profesión actual: Diseñador y productor musical
Grupos relacionados: Wormed, Nüll, Godüs, Unsane Crisis, Infernal, Wrong, Banished from Inferno…
Puesto dentro del grupo: Voz
Enlaces relacionados: Sitio Oficial Wormed

Cuéntanos quién eres, y cuál es la faceta por la que te conocemos en el mundillo.

¡Hola! Algunos me conocerán más por Phlegeton, el vocalista de Wormed. También toco la batería en varios grupos y proyectos y llevo mi propio estudio de arte donde hago portadas de discos para bandas, mayormente metal, desde nacionales a internacionales.

¿Cuánto tiempo llevas tocando? ¿y en tu grupo?

Llevo tocando al menos 22 años. Empecé tocando el bajo en una banda de colegas cuando éramos unos chavales, con gente que después formaron parte de Human Mincer y Tromort junto con el ilustrador Juanjo Castellano, ¡que tiempos! Después vinieron una serie de bandas, Nüll (como batería), Wormed (vocalista), Godüs (voz y batería), Unsane Crisis (batería), Infernal (batería), Banished from Inferno (batería), Wrong (batería y voces) entre otras. He estado grabando y dando directos con todos los grupos en la medida de lo posible desde entonces. Principalmente casi todo mi trabajo y esfuerzos se han centrado siempre en Wormed, en activo desde 1998.

«Poco a poco, si tu música gusta, trabajas duro y eres perseverante siempre llegan los frutos y de pronto te verás tocando en un festival internacional donde sólo soñabas con ir a visitar»

¿Cómo describirías el proceso de pasar de ser un fan a subirse al escenario?

¡Pues imagínate! Empecé viendo a bandas como Cannibal Corpse, Napalm Death, Vader, Impaled Nazarene (¡menudo concierto!)… en esos tiempos ya tenía mi primera banda, pero no hacíamos más que pasárnoslo bien en el local de ensayo, y no pensábamos en las consecuencias que hubiese tenido el habernos dedicado a esto más en serio desde el principio. Al final, todo es un paso bastante natural, te apasiona la música y sueñas con ser como ellos y finalmente sin darte cuenta estás ahí arriba. Poco a poco, si tu música gusta, trabajas duro y eres perseverante siempre llegan los frutos y de pronto te verás tocando en un festival internacional donde sólo soñabas con ir a visitar.

¿Tuviste algún tipo de formación musical o eres totalmente autodidacta?

Mi única formación musical se la debo a Andy C. Él era músico profesional, y nos estuvo formando sin apenas darse cuenta corrigiendo nuestros errores y obligándonos a seguir la claqueta a rajatabla cuando apenas sabíamos ni para que valía ese aparato. Era muy maniaco en la época en la que yo tocaba la batería en Nüll mientras él estaba en los teclados. Desde muy joven ya estaba tocando con metrónomo y secuencias. Poco después, cuando los dos empezamos en Wormed, me hizo ver que el death metal no tenía porqué seguir una norma establecida, de algún modo cambió mi manera de pensar sobre lo que era formar parte de un grupo. Supongo que tocar la batería también me ha ayudado mucho a enfocar con una perspectiva diferente una banda como Wormed, donde puedo ejecutar voces en patrones rítmicos fuera de lo común.

«Creo que [en España] no ha llegado una banda que tenga un sonido realmente único, y que haya sido reconocida a nivel mundial para que se fijen más en nuestro país (…) Aquí la tendencia general ha sido imitar a otros, y casi siempre tardíamente, cuando ya lo han hecho cientos de bandas en otros países»

España siempre parece un lugar improbable para lograr el éxito con el rock/metal. ¿Qué opinas de esta tendencia?

Creo que se debe a que todavía no ha llegado una banda que tenga un sonido realmente único, y que haya sido reconocida a nivel mundial para que se fijen más en nuestro país como ha podido pasar en Francia o en Italia, por poner un ejemplo. Aquí la tendencia general ha sido imitar a otros, y casi siempre tardíamente, cuando ya lo han hecho cientos de bandas en otros países.

Por otro lado, también veo un cierto auge de las bandas tributo, donde militan músicos de muchísimo talento. Si eres realmente bueno, ya tienes los temas compuestos, sólo hay que tocarlos con gusto y ganar dinero rápido. Esto es una cosa que respeto, pero pienso que no tiene nada que ver con la escena. Corren tiempos complicados económicamente hablando, y algunas formaciones cambian la pasión de antaño por la búsqueda del negocio para subsistir de ello mientras la competencia se lo permita.

Aún así veo un cierto resurgir de bandas realmente underground con las ideas muy claras y su visión claramente enfocada en el mercado internacional, y creeme, estoy seguro que de aquí a pocos años estaremos viviendo una época dorada para el metal estatal; se percibe el resplandor.

¿Cómo destacar frente a las demás bandas?

¡Muchos pagarían por ese libro! Bien, supongo que debes evitar hacer lo que está de moda, lo que hacen todos, o mejor dicho, no fijarse demasiado en lo que hacen los demás y trazar tu propio camino y estilo musical. Si algo no te ha funcionado bien desde el principio, algo estás haciendo mal.

¿A qué te dedicas en la vida real para llegar a fin de mes?

Me dedico a crear portadas, diseños gráficos, 3D y logos para bandas y pequeñas empresas, también hago mezclas y masterizo discos. Entre lo que me ofrecen mis pequeños trabajos artísticos y lo que producimos con Wormed me puedo permitir sobrevivir con esto.

«Adelantar mucho dinero nunca te asegurará el futuro de tu grupo, he visto muchos casos donde la banda adelanta mucho dinero para cubrir los básicos y nunca lo han llegado a recuperar (…) Hay que tener en cuenta que el patrocinio es algo que nunca se debe menospreciar»

¿Te genera más gastos o ingresos tu participación en la banda?

Al principio, como cualquier negocio, empiezas con gastos, pero actualmente se puede decir que no pierdo dinero. Aún no he pagado un estudio de grabación de mi propio bolsillo ya que por fortuna, las discográficas con las que hemos trabajado siempre nos han apoyado económicamente. No lo llames “suerte”, llámalo saber elegir bien, intentar no caer en los mismos errores y hacer las cosas con cabeza. Adelantar mucho dinero nunca te asegurará el futuro de tu grupo, he visto muchos casos donde la banda adelanta mucho dinero para cubrir los básicos y nunca lo han llegado a recuperar. ¿Merece la pena? Hay que tener en cuenta que el patrocinio es algo que nunca se debe menospreciar.

¿Dónde está la frontera entre un hobby caro y una profesión con la que ganarse el pan?

Depende, cualquier músico sabe que mantener una banda es un hobby bastante caro. Hay que identificar muy bien si realmente te dedicas a esto como hobby o como un trabajo para ganarte el pan. Todo el mundo empieza en esto como hobby, sin ninguna pretensión y poco a poco la cosa se transforma en una dedicación al 100%, es cuando los músicos que disfrutaban con el hecho de tocar con sus amigos abandonan el grupo porque sus ‘verdaderos’ trabajos no les permiten dedicarse a esto.

Si uno hace la cuenta del dinero que nos habremos gastado muchos grupos en locales, más el equipo que vas adquiriendo con los años, su mantenimiento, transportes, gasolina, vuelos… la factura puede asustar a cualquiera. Pero como comentaba antes, siempre hay que hacer una inversión inicial, algunas veces esto se convierte en un trabajo de años que nunca será valorado como merece.

¿Consideras a corto, medio o largo plazo la posibilidad de poder vivir de la música?

Por el momento me mantengo de ello. Todos los beneficios que recibo proceden de mi música y por los trabajos que hago para otros músicos.

«Tendría que haber una legislación más moderna para los músicos y los espacios para sus actividades, una mejora en la gestión de los derechos de autores y una bajada de impuestos en lo que respecta a las actividades artísticas (…) además de no marginar el género “metal” en los medios públicos»

¿Qué tendría que cambiar para que eso fuera posible?

En primer lugar tendría que haber una legislación más moderna para los músicos y los espacios para sus actividades, una mejora en la gestión de los derechos de autores y una bajada de impuestos en lo que respecta a las actividades artísticas, adquisición de instrumentos y espectáculos para fomentar la cultura de la música, además de no marginar el género “metal” en los medios públicos.

¿Qué has aprendido hasta ahora del negocio como músico?

Que en el negocio de la música abundan los tiburones y hay demasiados delfines disfrazados de tiburón.

¿Qué porcentaje de las experiencias personales se transportan a la partitura?

Supongo que una gran parte, ya que el día a día de cada uno es parte del aprendizaje e inspiración personal. Todo cúmulo de experiencias al final terminan plasmadas en forma de letras, composiciones, o conductas en el escenario.

Un deseo para el futuro

Seguir creando material con mis bandas, mejorar como músico, no parar de avanzar, descubrir nuevos lugares, nuevas emociones y poder compartir con la mayor parte de gente posible a lo que tanto esfuerzo dedico! ¡Gracias por seguir ahí!

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