Batería, guitarra, voz y fuera. Nada más hace falta para estrujarnos el cráneo a base de metal sludge jodidamente malencarado.
Eso es lo que hacen Abbey – a la batería para el caso – y Tommy – encargado de guitarra y en las voces -, en su criatura bautizada como Oryx.
En su reciente videoclip ‘Blackened earth’, y de forma extensiva en todo su nuevo álbum ‘Stolen Absolution’, la ecuación funciona a las mil maravillas y sus imprecaciones se descargan con toda la mala baba que hay sobre la faz de la Tierra.
Stolen absolution es su segundo largo y ha sido publicado en estos últimos días – el 23 de febrero – a través de Midnite collective y Graven Earth Records.
En cuanto acabes con el clip, hazte un favor y dale una vuelta al disco al completo, porque no lo lamentarás.