El reloj corre hacía el quinto año desde que ‘A mother named death‘, el último álbum de Evadne, empezase a dar vueltas por el mundo… el tiempo vuela… pero los levantinos ya tienen preparado el siguiente episodio que saldrá a nuestro encuentro en el mes de diciembre de este mismo año. Ahí al lado está.
Se puede confirmar ya que ‘The pale lights of fireflies‘ será el título del mismo y que los sellos Solitude Productions y The Vinyl Division andan en la trastienda con todos los preparativos para su edición.
Este nuevo trabajo ha sido grabado y mezclado en SP Estudios con Sergio Peiró y el mastering final estuvo bajo la tutela de Svante Forsbäck, que cuenta a sus espaldas con otros trabajos con más que reconocidas bandas como Entombed, Candlemass, 69 eyes o Rammstein.
Además, Jaani Peuhu (Mercury Circle, Iconcrash, Hallatar, Swallow the sun) y Carline Van Roos (Aythis, Remembrance, Lethian Dreams) se cuelan en la grabación y aportan su granito de arena a lo largo del álbum.
Pero vamos al meollo, y es que ya podéis disfrutar del primer adelanto de este disco.
Más abajo puedes ver el lyric vídeo realizado por Dronicon Films para el corte titulado ‘The Vacuum‘. Este es uno de los ocho temas que esperan pacientemente a ser descubiertos, y es el que cierra el álbum con un hiriente filo de melódico y nostálgico.
Avisaban de que en este álbum encontraríamos nuevos horizontes musicales y así parece ser. Fiel al espíritu de la banda y sin ser radicalmente rupturista con su legado musical, dejan esta vez en la recámara la vertiente más doom de su personalidad para destaparse en un corte más intimista y que nos envuelve con cálida tristeza gracias a esas voces lánguidas (casi arrastradas por el devenir de la vida) en primer plano y con protagonismo patente. El marco para ellas es una burbuja a base de vaporosos teclados, arpegios sangrantes y percusiones que en su expresivo minimalismo calan más profundo si cabe.
Y lo cierto es que después de ver el trabajo de Natalia Drepina para la portada del álbum (que personalmente me encanta), todo cobra mucho más sentido.
Por supuesto, ganas de más.