El disco comienza de manera contundente con ‘Maldito Deseo‘, un tema muy influenciado por el metal moderno ejecutado por Skizoo. Esta influencia, se ve claramente reflejada en su estribillo, donde parece que estamos escuchando al propio Morti. Abel Jazz, principal compositor, productor y arreglista de la banda, demuestra desde un primer instante, su potencial como cantante. Su voz es diferente, no se como explicarlo, posee un registro muy particular, que imprime a cada tema un toque de elegancia, elevando cada composición a su máximo atractivo.
Un comienzo brillante de rock duro, como todo lo que seguiremos escuchando a lo largo de los 69 pistas y 69 minutos (de ahí él titulo del lanzamiento). ‘Dueño del Sol‘ da pie a uno de los temas más pegadizos que escucharemos. Un comienzo fabuloso, lleno de guitarras potentes y coros magníficos, nos introducen de lleno, en la canción perfecta para sus directos. Sigue con las increíbles líneas vocales de Abel.
La producción, está exquisitamente cuidada hasta el más insignificante detalle, y esto, queda fielmente plasmado en ‘No hay nadie‘. Con un comienzo muy a lo Sober, las melodías recordaran mucho a la banda de los hermanos Escobedo, va ganando en intensidad, según va desarrollándose, para regalarnos uno de los mejores temas. Pero si tenemos que hablar del tema por excelencia del disco, yo me quedo con ‘Sin Saber‘. Medio tiempo desgarrador lleno de melodías pegadizas, coronado por un estribillo lleno de fuerza. Líricamente hablando, es un corte precioso, lleno de sentimiento y ejecutado con una elegancia desbordante.
A partir de este momento el disco es una sucesión de temas impactantes que lograran situar a DiosA como una de las mejores bandas que han salido en los últimos tiempos. Prueba de ello, es el siguiente corte del álbum, ‘Segundos Fuera‘. Un tema que llamara mucho la atención, donde consiguen crear su propio estilo. Tan solo tenéis que pararos a escuchar la ambientación creada hacia el minuto tres de la canción, para daros cuenta de la calidad que atesoran estos chicos como banda.
Los compases finales de ‘Segundos Fuera‘ enlazan con los primeros guitarrazos de ‘Mentes Enfermas‘. Los sonidos oscuros aparecen por primera vez, en un tema que nos hará sentir momentos de tensión con la ambientación lograda con la sirena, y enloquecer con el estribillo. Mencionar la versatilidad lírica que proporciona un toque agónico a la canción con un resultado impecables. Siguiendo con el análisis, ‘Quien Soy Yo‘ es toda una sorpresa para nuestros oídos. Encontramos cierto regustillo a Sober, pero rebosa una autentica e indescriptible creatividad. Un tema lleno de arranques de potencia y un interesante solo de guitarra que os dejara fuera de combate.
Con ‘Mi Herida‘ le llega el turno a la balada del disco. Abel es dueño y señor de esta composición, donde lo más reseñable, como no podía ser de otra manera, es su interpretación llena de sentimiento y elegancia. Una composición emotiva, llena de momentos sobrecogedores y teclados mágicos. Hacen gala de sonidos pesados llenos de ritmos adictivos. En mi opinión, los músicos se encuentran más desenvueltos y Abel da lo mejor de sí mismo en ella.
Llegamos al final con ‘Cuarto de Colores‘, un corte alegre lleno de melodías pegadizas que mantiene el exquisito nivel mantenido en todas las anteriores composiciones. Pero aquí no acaba la cosa, entre tanta pista, encontrareis varias sorpresas que no pienso desvelar para no robar el encanto de descubrirlas por uno mismo.
