Cuando se unen dos grandes efemérides del mundo del cine, no puede salir otra cosa que una maravillosa filmación. Y es que Tobe Hopper y Spielberg crean con Poltergeist una película con fondo, tratando de forma sutil los temores que causa el mundo del ocultismo, o en este caso de los fenómenos espirituales llamados Poltergeist. Se cuenta la película linealmente, con una familia que se muda a una nueva casa, en la que conviven con sus protocolarios tres hijos ‘Made in America’,
No tardara la familia feliz en darse cuenta de que algo raro ocurre en su hogar. Siguiendo esta sencilla línea argumental, se plasmaran unas asombrosas interpretaciones de los mas jóvenes de la casa, con una Carol Anne desbordante en sus primeros planos. Tobe Hopper sabe perfectamente como representar el temor de los niños, usando para ello ágiles e inteligentes escenas, en las que abundaran objetos y situaciones tan sencillas que podrían parecer reales (Quien no recuerda a aquel payaso con esa cara de asesino en serie…)
Proseguirá el film, indagando de forma leve sobre el tratamiento que han de recibir estos fenómenos ocultos, introduciendo en la película personajes que harán que la trama se torne en un entresijo de misterio y acción. Una película que se deja ver, siendo este uno de los factores mas importantes a la hora de calificar la calidad de una filmación, en la que además, encontraremos detalles simpáticos y recordables, que hacen de Poltergeist una película de culto para muchos cinéfilos.
[Rating:8/10]
